
Cuando se trata de opciones elegantes y modernas para alicatados, las baldosas de porcelana rectificadas son, a menudo, la elección preferida para lograr la estética adecuada. Pero, ¿qué son las baldosas rectificadas y cuáles son sus pros y contras? En este artículo, descubrirás más sobre las baldosas de porcelana rectificadas y no rectificadas.
¿QUÉ ES UNA BALDOSA DE PORCELANA RECTIFICADA?
Definimos las baldosas rectificadas como aquellas que han sido ajustadas y alineadas con precisión para lograr una apariencia impecable y prístina. Este refinamiento generalmente implica el rectificado o pulido de los bordes de la baldosa. Debido a estos tratamientos, las esquinas de las baldosas rectificadas mantienen un ángulo de 90 grados, lo cual es crucial para aplicaciones específicas. La rectificación se aplica exclusivamente a baldosas de cerámica, porcelana o baldosas cocidas debido a su precisión inherente, lo que garantiza una exactitud dimensional consistente.
LOS PROS Y CONTRAS DE LAS BALDOSAS RECTIFICADAS
Hay algunas ventajas y desventajas de las baldosas rectificadas que debes considerar. Veamos algunos ejemplos.
Pros de las baldosas rectificadas:
- Más fáciles de instalar que las baldosas no rectificadas
- Las baldosas rectificadas tienen bordes precisos, lo que facilita su instalación y proporciona un acabado suave y limpio. Esto es especialmente cierto si planeas usar baldosas de mayor tamaño.
- Pueden cortarse a tamaños específicos. Esto asegura que puedas obtener un estilo específico de acuerdo con los patrones de piso que buscas, como baldosas de porcelana con efecto madera o baldosas de porcelana con efecto concreto.
- Diseños modernos
- Las líneas de lechada estrechas y los bordes precisos de las baldosas rectificadas proporcionan un aspecto elegante y moderno, contribuyendo a una superficie limpia y uniforme, que es especialmente deseable en estilos de diseño moderno y minimalista.
- Increíble versatilidad
- Las baldosas rectificadas son adecuadas para diversas aplicaciones, y en algunos casos, las baldosas para el suelo pueden usarse para paredes y revestimientos exteriores, haciéndolas ideales para baños, cocinas, áreas de estar e incluso espacios comerciales gracias a sus hermosos diseños.
Contras de las baldosas rectificadas
- Necesitan un presupuesto ligeramente más alto. Las baldosas rectificadas tienen un costo más alto que las baldosas no rectificadas. Esto se debe a los procesos de fabricación adicionales involucrados para lograr bordes precisos.
- Pueden sufrir astillado con el tiempo. Debido a sus bordes afilados, las baldosas rectificadas podrían astillarse, lo que potencialmente afectaría su durabilidad con el tiempo. Esto significa que se debe tener especial cuidado al instalar estas baldosas para asegurar que sus bordes no queden expuestos.
¿CUÁLES SON LAS DIFERENCIAS ENTRE LAS BALDOSAS RECTIFICADAS Y NO RECTIFICADAS?
Una baldosa rectificada se produce con una atención meticulosa a los detalles, asegurando que cada lado tenga medidas idénticas. Por lo tanto, las baldosas rectificadas permiten la creación de juntas de lechada muy pequeñas, fomentando la impresión de una única área extensa de baldosas, promoviendo una estética más fluida.
En comparación, las baldosas no rectificadas tienen bordes irregulares, lo que les da una apariencia más orgánica. Debido a su naturaleza desigual, las baldosas no rectificadas necesitan juntas de lechada más anchas, produciendo un efecto de baldosa más convencional. El tipo de baldosa que finalmente elijas dependerá de tu preferencia personal. Las baldosas rectificadas tienden a exudar un estilo moderno gracias a su acabado sin fisuras, mientras que las opciones no rectificadas ofrecen mayor flexibilidad al usar lechadas decorativas.
ABRAZA LA BELLEZA DE LAS BALDOSAS DE PORCELANA RECTIFICADAS
Las baldosas de porcelana rectificadas ofrecen bordes precisos, una estética moderna y un mantenimiento más sencillo, lo que las convierte en una opción popular para lograr una apariencia sin fisuras y pulida en las instalaciones de baldosas. Puedes conseguir asesoramiento en www.discesur.es
Un comentario
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